Viajar con el perro al extranjero
Las leyes y las normativas varía mucho de un país a otro. Donde la rabia ya ha sido erradicada, como por ejemplo Gran Bretaña, se impone un estricto periodo de cuarentena a cualquier perro que se pretenda introducir en el país. Hay países que exigen una especie de pasaporte canino, (un documento que demuestre que el perro ha recibido las vacunaciones necesarias, así como una identificación indeleble en forma de chip, o tatuaje. Infórmese antes de iniciar el viaje.
Viajar con el perro en tren y en autobús
Hay que acostumbrar al perro desde cachorro a viajar en autobús o tren, o de lo contrario podrían tener demasiados problemas a causa del movimiento y los ruidos.
Se debe obedecer las normativas vigentes de cada localidad y mantener al perro siempre atado con la correa. Es conveniente ser considerado con los demás viajeros, aunque le obliguen a pagar medio billete por el perro, no significa que el perro tenga derecho a subirse a los asientos.
Cuando el perro no va de viaje
Si va ir de vacaciones sin el perro, asegúrese de que el perro estará bien durante su ausencia, Pues todos los veranos los refugios caninos se llenan hasta arriba por culpa de seres irresponsables que deciden abandonar al perro a su suerte en plena calle o llevarlo a la perrera simplemente para ahorrarse lo que costaría dejarlo en una residencia canina durante su ausencia.
Nos conviene acudir a una residencia que alguien nos haya recomendado, y además asegurarnos personalmente de que es adecuada visitándola.
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